Un estudio de Corero Network Security recoge que para más de la mitad de los profesionales de seguridad de TI (52%) la pérdida de confianza y de respaldo por parte de sus clientes fueron las consecuencias más perjudiciales de los ataques DDoS para sus negocios. Asimismo, una quinta parte de los encuestados (22%) indicó que los ataques DDoS impactaron directamente en su línea de negocio, interrumpiendo la disponibilidad del servicio y obstaculizando la generación de ingresos.