De acuerdo con una encuesta llevada a cabo por B2B International y Kaspersky Lab, el 32% de los encuestados que comparten un dispositivo con conexión a Internet con familiares, compañeros de trabajo o amigos no toma las precauciones necesarias para proteger su información. El motivo es que no ven existen riesgos asociados con el intercambio de estos dispositivos, a pesar de que puede aumentar significativamente las posibilidades de que los datos almacenados en el dispositivo se pierdan o sean robados. De hecho, cuantas más personas utilizan un dispositivo, mayor será la probabilidad de que uno de ellos cometa un error y caiga en la trampa de un cibercriminal.
Hoy en día, el propietario de un ordenador, teléfono o tablet a menudo no es la única persona que utiliza este dispositivo para acceder a Internet. Así, el 28% de los encuestados comparten dispositivos con otros adultos en su hogar, el 5% se los dan a sus hijos, mientras que el 1% permite incluso a colegas y a otros conocidos a utilizar sus dispositivos. Esto se aplica a los dispositivos que más a menudo se utilizan para acceder a Internet, lo que significa que tienen más probabilidades de contener datos de valor, como datos de cuentas de acceso y contraseñas.